Huawei es una de las marcas que más está peleando actualmente por subir posiciones en el ranking de fabricantes mundiales. Hoy por hoy sólo está por detrás de Samsung y Apple pero no deja de presentar nuevos modelos para intentar sobrepasarlos.

Esto lo hace en la gama alta, en breve presentará los Huawei P20), pero también en la gama media que es donde nació este Huawei Mate 10 Lite, un terminal que aunque se incluye dentro de la familia Mate podría haber pasado por integrante de los P.

En su origen este dispositivo tenia un precio que rondaba los 350 euros pero poco a poco ha ido cayendo y actualmente se puede comprar por unos 260 euros, lo que lo sitúa en el punto de mira del comprador medio, al menos en España, cuyo presupuesto esta entre los 200 y los 300 euros.

Por eso hemos decidido hacer este análisis ahora, porque creemos que el Huawei Mate 10 Lite, si bien es el mismo dispositivo que cuando se lanzó, ahora tiene una relación calidad precio mucho mejor, lo que lo hace mas recomendable.

Vídeo análisis Huawei Mate 10 Lite

Diseño y construcción: demasiado sobrio

El fabricante chino ha logrado equilibrar en sus móviles los buenos acabados con la ergonomía y ello sin aumentar el peso, lo cual tiene mucho mérito.

No obstante el diseño de este terminal se nos ha antojado demasiado simple, sobre todo en la parte trasera, que es donde los diferentes smartphones intentan destacar. La parte frontal, dominada por la pantalla, apena deja espacio para decisiones como curvar o no las esquinas y Huawei, por el momento, se resiste a ello.

Análisis del Huawei Mate 10 Lite: grandes características y mejor precio

En la zona posterior vemos cómo el único elemento que destaca es la cámara doble pero no es eso e sí algo malo. Lo que nos choca es que el terminal entero tiene un color que hace que pase tremendamente desapercibido. Unos resaltes en el lector de huellas, en la propia cámara o en las antenas quizás le habrían dado más personalidad.

Donde sí que no tenemos quejas en la ergonomía y es que este smartphone es realmente cómodo en la mano por no ser demasiado ancho, pese a sus casi 6 pulgadas de pantalla, y por tener los cuatro laterales y cuatro esquinas curvadas.

Se echa en falta que el cargador sea USB C pero la verdad es que es sólo por comodidad ya que la velocidad de carga de este modelo es bastante buena.

Ningún tipo de sonido surge cuando agitamos el terminal y los botones responden bien.

Resumen de características

Potencia y características: decente con un pero

Huawei es uno de los pocos fabricantes a nivel mundial que puede presumir de tener su propia fábrica procesadores. Es por eso que con alguna excepción puntual siempre vemos chips Kirin en sus smartphones.

Esta no es una excepción y el Mate 10 Lite usa el Kirin 659, el procesador estrella de Huawei en la gama media.

Si lo comparamos con sus rivales directos podemos decir que se comporta de manera similar, quizás con algo menos de rendimiento en el apartado gráfico. Con el coste de este móvil no ponemos pegas a la elección pero sí que creemos que Huawei debe dar paso ya a la siguiente generación.

Los otros dos grandes apartados de potencia, la RAM y la ROM, están no sólo a la altura de los móviles de gama media sino también de algunos de gama alta. La multitarea con 4 GB es válida y tenemos más de 50 GB libres para poder usarlos como queramos.

El sensor de huellas como era de esperar funciona de manera rápida y precisa y tenemos opción de usar auriculares normales dado que no se ha eliminado el conector de jack 3.5 mm.

Aunque es el modelo Lite, al ser un Mate hubiéramos esperado que se incluyera el chip NFC para pagos móviles, algo que echamos en falta, aunque sí está tanto el de radio FM como el emisor de infrarrojos.

Una de las pegas que le ponemos al terminal es que no tenga Wifi de doble banda y es que es algo que hemos visto que muchos móviles chinos más baratos ya traen. No debería ser esta una opción que distinga entre gamas y es que la diferencia de velocidad entre una Wifi a 2.4 GHz y una a 5 GHz es demasiado elevada.

Pantalla: grande y nítida

Los terminales Lite siempre han sido móviles contenidos en todos los sentidos, de ahí su apellido. Sin embargo el primer Mate con este sufijo no es un móvil pequeño en absoluto.

Su pantalla es de 5.9 pulgadas pero en este caso la empresa ha optado por una proporción más alargada, un ratio 18:9, que hace que en conjunto el móvil no se sienta demasiado grande en la mano como hemos comentado.

La resolución de este panel es FHD+, es decir, 2160×1080 px, y tanto los colores como la reactividad del panel nos parecen muy buenos. No tanto lo es el brillo automático que se ha quedado al máximo en algunas ocasiones aunque hemos cambiado de ambiente. Se ha solventado con el simple gesto de apagar y encender la modalidad manual pero es un fallo en sí.

Entre las opciones que tenemos en los ajustes del móvil destacan la opción de forzar las apps no adaptadas a pantalla completa, el poder cambiar el tamaño de la interfaz y del texto, por separado, o poder usar el modo lectura, que suaviza los tonos azules.

Cámara: dos delante y dos detrás

Una de las novedades de este modelo, que actualmente tienen algunos más, es la presencia de dos cámaras tanto delante como detrás. Esto permite usar el modo retrato independientemente de si queremos hacernos un selfie o si queremos realizar una fotografía a otra persona.

La cámara trasera, con sensor de 16 Mpx y 2 Mpx, con buena luz presenta unos resultados correctos y el balance de blancos es muy bueno, no hemos necesitado variar la temperatura de color en ningún momento. El contraste entre luces y sombras también cumple y sólo vemos algún fallo a la hora de querer usar el modo retrato ya que no siempre recorta bien los bordes, al menos cuando lo ponemos en el compromiso de situaciones complejas. En las personas sí que suele acertar.

De noche la apertura baja hace que los elementos salgan el movimiento si no hacemos una toma estática pero la calidad de las fotografías en modo automático, como capta las luces y en generar el resultado nos ha parecido muy superior a lo que esperábamos.

La cámara delantera tiene un sensor principal de 13 Mpx y uno secundario de 2 Mpx que también nos permite realizar fotos con desenfoque e incluso aplicar filtros en la zona trasera, aunque no siempre quedan tan bien como esperamos.

Con buena luz los resultados son muy decentes pero en interiores o con poca luz vemos cómo las imágenes muestran falta de detalle, algo que se acusa sobre todo si aplicamos el maquillaje digital a los selfies. En el modo retrato de noche ayuda el flash LED delantero, algo que no todos los móviles tienen, pero si usamos demasiado efecto belleza el detalle se acaba perdiendo.

Autonomía: buena, sin más

En la primera prueba de batería hemos estado exclusivamente usando el terminal en cobertura Wifi. Hemos instalado y configurado numerosas aplicaciones y hemos probado juegos como PUBG o HearthStone, además de Asphalt. Hemos llegado a las 3 horas de pantalla con 40 horas totales de autonomía.

En la segunda prueba de batería hemos hecho un uso extremadamente intenso del terminal ya que siempre en exteriores hemos estado jugando a HearthStone, a PUBG, hemos hecho fotos, grabado vídeos, editado dichos videos, hablado por teléfono y escuchado muchísimo tiempo podcasts. Hemos llegado a casi 5 horas de pantalla con 10 horas totales de autonomía.

En la tercera prueba de batería hemos estado usando el móvil para tareas menos exigentes aunque hemos echado alguna partida puntual a los mismos juegos que anteriormente, hemos hecho fotos y sobre todo hemos leído y usado Twitter. Hemos llegado a 6 horas de pantalla con 40 horas totales de autonomía.

Benchmarks

En Antutu hemos llegado a los 82810 puntos, en 3D Mark a los 403 y por ultimo en Geekbench 4 nos quedamos en 912 puntos en monocore y en 3550 en multicore.

Interfaz y apps: Aún Android 7, pero sin fallos

Huawei no lanzó este modelo con Android 8, algo que sí hizo con sus hermanos mayores, los Mate 10 y Mate 10 Pro. Eso hace que la experiencia sea algo diferente pero no es una mala sensación la que nos deja.

Como es de esperar en la empresa china, tenemos EMUI sobre la versión pura de Android y eso cambia muchas funciones.

Personalmente me gustan mucho los gestos que podemos hacer con los nudillos, que nos dejan hacer cosas como realizar capturas de pantalla o abrir aplicaciones con un gesto independientemente de dónde estemos. También podemos activar la multitarea de forma rápida.

La personalización es muy elevada y podemos cambiar el tema, los iconos e incluso elegir si queremos una interfaz basada en carpetas o en un dock con todas las apps en su interior para poder poner fuera las que mas usemos. Huawei por defecto opta por la primera posibilidad pero es realmente fácil cambiarlo.

Incluso podemos usar los escritorios en horizontal si activamos la opción correspondiente, algo que en ocasiones quizás sea de utilidad.

Conclusión: un terminal recomendable ahora más que nunca

Analizar un smartphone sin tener en cuenta en precio a veces es necesario pero a la hora de la verdad, cuando queremos recomendarlo, o no hacerlo, hay que considerar también el coste.

El Huawei Mate 10 Lite es un móvil que se encuentra actualmente en un momento dulce. Es un terminal que tiene un precio ajustado para lo que ofrece. Obviamente no compite con sus hermanos mayores pero aun así no tiene un fallo grande.

Disponemos de buenas cámaras, batería decente, una pantalla grande y cómoda y una potencia que no se nos queda corta para casi nada.

No está carente de fallos, como la carencia de NFC o de tener un diseño que, más que decepcionante, es algo aburrido, pero son temas muy menores, sobre todo porque está en un rango de precios en el que muchos usuarios buscan otras cosas.

Muchos rivales fallan en batería, en potencia o en rendimiento. No es el caso de este móvil, lo que le da una baza enorme para enfrentarse a la competencia.

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