Llevamos unos años donde el contenido multimedia se ha hecho el gran jefe de la telefonía móvil y es el gran responsable de que las pantallas no dejen de crecer. No podemos atribuir a este elemento solamente este aumento de diagonal pero gran parte de las virtudes de las que hoy disfrutamos es gracias a esta excusa. Mucha más información en un espacio más o menos reducido, la aparición de los smartwatches como sustitutivo del antiguo teléfono móvil y éste pasa a ocupar un lugar central de nuestra vida.
Es curioso, se ha establecido como un dispositivo central de nuestra vida, dejando de lado su original carácter comunicador. Sin embargo aún hay mucha gente, entre los que me encuentro, que no concibe tener en su bolsillo un terminal de semejantes dimensiones, respetando lo que los demás piden, preferimos algo más cómodo que se adecue a nuestro uso. De hecho estamos viendo como al amparo de Sony y su valentía en este campo, están empezando a florecer dispositivos móviles de gama alta y tamaño más contenido.
Como hemos podido leer en artículos anteriores, muy probablemente el próximo Nexus tenga 2 versiones diferentes, jugando con tamaños de 5.2 y 5.92 pulgadas. Este último de ellos sería una versión gigante del nuevo Moto X y de ahí derivaría su nombre, Nexus X. Desde luego si no existiera un modelo de menos diagonal no sabemos hasta que punto se vendería bien ya que, aunque hay público para esos tamaños, no es el ideal si quieres acceder al gran público.
Nosotros siempre hemos considerado el espectro 4.7-5 pulgadas el ideal para un terminal pero los tiempos cambian y parece que ahora los grandes apuestan por 5-5.2, demasiado si no eliminan marcos.
Pero eso no es lo importante, lo que de verdad supone un verdadero paso adelante es la posibilidad de apostar por un binomio de iguales características y especificaciones, con tamaños para que el usuario pueda elegir libremente. Sony en su momento ya presentó un Z1 Compact que ha hecho las delicias de mucha gente en este tiempo en el mercado y ahora ha vuelto con un Z3 de 4.6 pulgadas mucho más maduro y un diseño acorde a su evolución. Incluso hemos podido ver lo nunca visto, Apple ha apostado por dos tamaños en su iPhone, algo que jamás podríamos haber con Jobs al mando y que ahora es una realidad. Todos los fabricantes se están dando cuenta que competir en más estratos con dispositivos de calidad puede dar buenos resultados, en lugar de renunciar a ciertos nichos por ir directamente donde dicte el mercado.
No seremos nosotros los que dicten lo que se debe y no se debe hacer pero era incomprensible como en un mercado con tantos fabricantes y tan diferentes dogmas de cada uno, a nadie se le hubiera ocurrido abarcar este campo. La única opción que se nos ocurre para dar respuesta a esto es que los tamaños de pantalla hasta este momento han sido comedidos, los grandes se han quedado en las 5 pulgadas o alrededor de ellas, salvo el caso del Note 4 o el G3. Aún así, los que han subido el tamaño han apostado por una reducción de marcos para que el dispositivo sea lo más pequeño físicamente posible, como ejemplo de ello está el terminal coreano, que es poco más grande que un iPhone 6 y en su cuerpo caben unas asombrosas 5.5 pulgadas.
No sabemos que rumbo va a tomar el mercado ni podemos predecir que harán los fabricantes pero parece que en algunos casos, como Samsung, se va a mantener estable porque ya tiene esa política de dos terminales en la gama alta, sin embargo, está por ver que hace LG, HTC o Motorola con sus dispositivos.
Sony ha tomado una determinación, Google le ha seguido y Samsung ya la tenía, la pregunta es ¿Cómo avanzará el mercado estos meses? ¿Crecerán los gama alta más aún y los smartwaches tomarán la posesión como principales elementos móviles? La división de la gama alta está servida.
