Diferenciar un modelo en el mercado de los smartphones no es algo sencillo. Hay demasiadas marcas y demasiados modelos para lograr algo verdaderamente distinto. Pese a eso los fabricantes intentan combinar una serie de factores para hacer terminales que sean más adecuados que los de la competencia para los compradores.
Doogee tiene una línea de móviles de gran batería, los BL, de la cual probamos recientemente el Doogee BL 5000, un terminal con cuatro curvas en la zona trasera.
Ahora vamos a analizar el segundo integrante de esta familia, el Doogee BL 7000 que se caracteriza además de por su enorme batería por tener un diseño más elegante y sobrio en el que destaca la parte trasera que imita al cuero.
Vídeo análisis Doogee BL 7000
Diseño y construcción: diferente pero muy pesado
Se agradece que los fabricantes intenten diferenciarse un poco del resto del mercado. Este móvil es cierto que nos ha recordado mucho al LG G4 con acabado en piel ya que el tacto trasero, sin ser el mismo, nos ha resultado similar.
Es agradable y junto con el marco de metal da una buena sensación en la mano aunque el que use líneas de diseño tan rectas lo hace algo cortante en la mano.
Pero el principal problema, al igual que sucede siempre en este tipo de modelos, es el peso y en este caso vemos que no estamos ante una excepción. Son 220 gramos los que tendremos que coger en la mano cada vez que vayamos a usar el móvil.
En sensor de huellas se coloca en la parte frontal y se nos ha hecho un poco difícil alcanzarlo en alguna ocasión, por las dimensiones del terminal, sobre todo el grosor de 11 mm.
Por otro lado seguimos sin entender por qué Doogee no apuesta ya por el USB Tipo C y sigue manteniendo el microUSB. Sí, es un terminal de menos de 140 euros, pero aún así es algo que nos gustaría que ya fuera un estándar.
Por último mencionar que la combinación de color, con frontal en negro y trasera en champán, es un acierto. Le da cierto carisma sin llegar a ser hortera.
Resumen de características
Potencia y características: digno gama media baja
Poco a poco vemos cómo móviles de poco más de cien euros pueden tener más RAM y memoria interna de la que necesitan los usuarios a los que van destinados. En este caso son 64 GB los disponibles, de los cuales en realidad podremos usar algo más de 53 GB y contaremos con 4 GB de RAM.
El punto débil de estos modelos es el procesador, que sin ser malo no está a la altura de las otras especificaciones. De nuevo en la empresa optan por el Mediatek 6750, un chip de ocho núcleos que aunque tiene un consumo bajo se queda corto para algunas tareas.
El sensor de huellas funciona bien y aunque al principio nos ha parecido más lento que los que hemos probado en los últimos meses, poco a poco vemos que no es así. No falla normalmente y por eso lo hemos dejado activado. No obstante en una ocasión dejó de detectar huellas y pulsaciones y tuvimos que reiniciar el móvil.
A esto hay que sumar un reinicio automático que nos pasó en uno de los días. No es que sea trágico, pero no deberían darse nunca.
Pantalla: nada relevante
Este modelo incorpora una pantalla de 5.5 pulgadas con resolución FHD. Es posible que esto último sea el motivo por lo que la autonomía, siendo buena, no es excepcional.
En la calle la podemos usar más o menos sin problema pero es cierto que tenemos muchos reflejos en ocasiones; eso sí, ocasiones algo forzadas.
El brillo automático es algo errático y la pantalla no siempre responde rápido pero no se trata de un problema del panel, sino del procesador elegido, que no siempre es capaz de obedecer de manera instantánea.
Cámara: tres de 13 Mpx
Doogee ha apostado por poner tres sensores iguales tanto delante (uno) como detrás (dos). Están fabricados por Samsung y la calidad es la que podemos esperar de un móvil de este precio.
La cámara trasera con buena luz se comporta bien, incluso con un rango dinámico algo mejor de lo que solemos ver en estos móviles. Es rápida disparando y aunque no tanto enfocando no llega a ser lenta.
El contraste entre luz y sombra se realiza bien, sin quemar zonas o dejar otras subexpuestas y la nitidez es aceptable.
El problema viene de noche o con poca luz, ya que la nitidez baja bastante y encontramos bastante ruido en las imágenes. Además es más complejo hacer una foto sin que salga trepidada.
Básicamente la experiencia fotográfica es la que esperaríamos de un terminal de esta categoría, no olvidemos que este apartado es en el que más s diferencias las distintas gamas de producto.
Autonomía: muy buena pero no excepcional
En la primera prueba de autonomía hemos usado mucho el móvil en exteriores y un poco en interiores. En parte como GPS y también haciendo muchas fotos. Hemos leído y usado aplicaciones sociales e incluso hemos echado alguna partida a HearthStone. Hemos llegado a las 6 horas de pantalla con 42 horas totales.
En la segunda prueba de autonomía la hemos hecho en Wifi aunque sin usarlo mucho, y en movilidad, habiendo usado redes sociales y también HearthStone. Hemos llegado a las 4 horas y media de pantalla con 36 horas totales.
En la tercera prueba de autonomía hemos estado usándolo sólo en Wifi. Hemos jugado a HearthStone, hemos mirado Instagram y Twitter además de Facebook. Hemos llegado a las 9 horas de pantalla con 20 horas totales.
La velocidad de carga es algo clave en este modelo y al contrario que en otros hemos tenido que usar el cargador que viene en la caja para tener tiempos normales. Llenar una batería de más de 7.000 mAh no es algo rápido si cogemos el primer cargador que encontremos.
Benchmarks
En Antutu hemos alcanzado a los 39303 puntos y en Quadrant nos hemos ido a 14436. En 3D Mark hemos logrado 347 puntos. En Geekbench 4 alcanzamos los 620 con un núcleo y 1825 con cuatro núcleos y en Vellamo, el otro test doble, los 1004 con un núcleo y 2172 con los cuatro núcleos.
Interfaz y apps: algunas modificaciones pero nada grave
Cuando vamos a probar un móvil de un fabricante chino ya no sabemos a qué atenernos. Podemos ver desde un fork entero del sistema hasta un uso casi puro de Android.
En este caso estamos más cerca del segundo caso que del primero aunque hay modificaciones estéticas en aspectos como los ajustes, que tienen iconos más coloridos. Preferimos que no sea así pero al ser casi la mayor modificación de la interfaz no podemos quejarnos.
Tanto los escritorios como la multitarea y la barra de navegación están como vienen de serie en Android y las aplicaciones preinstaladas si bien están no son demasiadas. Eso sí, querríamos haber desinstalado algunas y no podemos, sólo se nos permite deshabilitarlas.
Conclusión: un terminal diferente
Este modelo no podemos decir que sea uno más. la enorme batería y el acabado distintivo hacen que sea un smartphone curioso. Que merezca o no la pena depende de estos factores.
Hemos de valorar mucho el precio y la batería para optar por él ya que en la parte negativa tenemos un peso desmedido así como un software que si bien no es demencialmente inestable sí que necesita ser pulido.
Dentro de la misma marca nos han gustado más propuestas como el Doogee F7 Pro o el Y6 Max pero es cierto que son más caros. Doogee debe pulir su software y si puede optar por mejores procesadores pero aún así, en según qué circunstancias, puede ser recomendable.
El Procesador es Mediatek y no Doogee. El Peso solo es 20 Gramos más que el Iphone 8 Plus y 25 gramos que el Note 8. Una barbaridad vamos… Claro si lo comparas con algo pequeño… es pesado. Pero con una batería de 7060 mhA que esperabas ?
Salu2