Todos los años cada fabricante presenta un terminal que pretende ser el emblema de lo máximo que es capaz de crear la marca, una referencia no sólo para los usuarios que aspiran a él sino también para las marcas ya que la mayor rivalidad se da en sus terminales más ambiciosos.
Este año LG presentó su propuesta en el MWC, el LG G5, que vino a mostrarse como el primer móvil modular del mercado, uno que permitía modificar algunos aspectos de hardware aunque para ello deberemos comprar accesorios por separado, los llamados LG Friends.
Vídeo análisis LG G5
Hemos estado usando el LG G5 en multitud de situaciones y en este vídeo os mostramos el resultado:
Materiales, peso y dimensiones
Este modelo es el primero de LG que está fabricado en metal si exceptuamos el marco del LG V10 que ya analizamos. Este paso parecía necesario viendo que la competencia había apostado por el cristal y metal aunque ya en el LG G4 el fabricante opto por el cuero.
Sin embargo la forma de fabricación del LG G5 hace que en la mano, aunque ergonómico y ligero, no dé la misma sensación que otros móviles de acabados premium. Nos ha recordado mucho al Meizu Metal en lo que a percepción de materiales se refiere.
El diseño de los botones es uno de los cambios con respecto a los tres antecesores. Aunque se mantiene el botón de encendido en la misma zona en la mano no es tan cómodo ya que al recudir el tamaño del terminal el dedo no acaba siempre ahí sino que a veces tocamos la cámara.
Además los botones de volumen se han movido al lateral en una localización mucho más común que la de los otros móviles de LG, algo que nos llama la atención ya que era una seña de identidad de la marca y además funcionaba correctamente.
Resumen
Potencia y prestaciones del LG G5
El LG G5 es el primer móvil con procesador Snapdragon 820 que probamos y el rendimiento es espectacular. Los 4 GB de memoria RAM y los 32 GB internos son cifras más comunes aunque la primera es DDR4 con lo que ello supone.
Hemos probado juegos exigentes, Asphalt 8, Assassin`s Creed Identity, Real Racing 3 y aplicaciones avanzadas de forma simultánea y no hemos tenido problema en ningún aspecto.
El G5 mantiene el sensor de infrarrojos que hemos visto en otros móviles y funciona perfectamente, siendo muy cómodo el no tener que disponer de diferentes mandos a distancia.
El sensor de huellas es uno de los mejores que hemos probado
Además, por segunda vez LG, tras el LG V10, apuesta por el sensor de huellas con la inclusión del mismo en el botón de encendido en la parte trasera. Es uno de los mejores que hemos probado y además no tenemos que hacer presión en el mismo.
Pero la apuesta más innovadora de la marca coreana han sido los módulos gracias al sistema desmontable de la zona inferior del móvil que además nos permite tener acceso a la batería. La apertura se hace mediante un botón que libera la parte intercambiable y hemos de reconocer que no hay holgura ni sonidos pese a esta decisión.
No hemos probado los dispositivos ya que intentaremos hacer análisis independientes pero el precio puede ser el mayor inconveniente de estos complementos.
Pantalla del LG G5
El panel de la familia G es de resolución QHD desde hace dos modelos en esta ocasión la diagonal es menor que en otros teléfonos y eso sube la cantidad de puntos por pulgada.
La calidad del panel es más que decente, cuenta con doble toque y pantalla activa que nos permite ver la hora en todo momento así como las notificaciones.
Contamos con SmartBulletin, por si queremos ver las noticias en el escritorio y con temas que nos permiten personalizar los escritorios pero no podremos modificar los parámetros de temperatura de color, nitidez o contraste.
Cámara del LG G5
Móviles con dos cámaras hemos visto ya varios, desde los intentos de tomas en 3D hasta propuestas más eficientes como es el caso.
El LG G5 apuesta por una doble cámara trasera cuya función es permitir realizar una fotografía con una apertura normal u otra con gran angular, lo que nos aporta una experiencia diferente y distintiva, pero sobre todo útil.
El software de la cámara está a la altura de lo esperado y los nuevos modos que combinan los tres sensores, uniendo el frontal, son divertidos.
La calidad de las fotografías es excepcional e incluso de noche el resultado es muy bueno a la altura del que hasta ahora era la referencia en solitario de este campo, el Samsung Galaxy S7. Fijándonos incluso en zonas de luces puntuales como farolas, donde fallan casi todos los móviles el LG G5 resuelve las situaciones bastante bien aunque como es lógico es aquí donde más sufre.
La cámara delantera no llama tanto la atención pero funciona perfectamente y los resultados son más que buenos. Sólo podríamos echarle en cara que por defecto el maquillaje digital es algo alto pero poco más.
Autonomía
LG ha apostado por una batería de 2800 mAh, muy por debajo de la de sus rivales, y eso se nota si bien no hemos tenido los gastos ingentes de otros tope de gama anteriores del fabricante.
En la primera prueba de autonomía hemos estado usando redes sociales, navegando, leyendo y hablando por teléfono. Hemos usado el terminal exclusivamente en Wifi y en interiores y con el brillo automático. Hemos llegado a las 3 horas y media de pantalla con 44 horas totales de autonomía.
En la segunda prueba de autonomía ha sido en Wifi pero también en 4G en ciertos momentos. Hemos estado usando redes sociales, hablando bastante por teléfono y escuchando más de una hora música mediante un altavoz bluetooth por lo que el uso ha sido mayor del que indican las horas de pantalla ya que hemos tenido 3 con 28 horas de autonomía total.
En otras pruebas más intensas hemos llegado a tener entre cuatro y cinco horas de pantalla en un día de uso, una cifra normal pero que está por debajo de otros rivales.
Benchmarks del LG G5
El procesador de este año del LG G5 es lo mejor del momento, al menos en lo que a Qualcomm se refiere. El 820 nos ha dado unos resultados altos, como esperábamos.
En Antutu hemos llegado a los 137945 puntos, en Quadrant nos vamos a los 39343, la puntuación más alta que hemos visto hasta el momento. En Geekbench 3 hemos llegado a los 2270 y 5442 puntos, también los más altos hasta el momento.
Interfaz y aplicaciones
LG ha modificado algunos aspectos sustanciales en la versión Android 6.0 que tiene el LG G5 siendo la más llamativa la de que no tiene cajón de aplicaciones aunque podremos modificar ese aspecto en los ajustes.
Como siempre la capa de LG nos ofrece algunas mejoras como la inclusión de botones en la barra de navegación de Android, cambiar el tipo de fuente o usar Always On, la función que nos deja tener la pantalla siempre encendida con la hora o con nuestro nombre.
Una novedad son los Smart Settings que nos permite configurar ajustes en función de nuestra ubicación física variando parámetros como las conexiones inalámbricas, los sonidos o la vibración.
Conclusión
LG se ha arriesgado al innovar con este terminal y aunque los módulos pueden ser un atractivo adicional la realidad es que el LG G5 es capaz de brillar con luz propia en prácticamente todos los apartados importantes.
La potencia es excepcional, la pantalla funciona y se muestra de igual modo, la cámara está a la altura de las mejores y el sonido tampoco es un problema. Incluso los añadidos como el sensor de huellas o el de infrarrojos lo mejoran.
El único pero que quizás podemos ponerle es el de los materiales y es que aunque son muy buenos en la mano no llega a la altura de otros rivales.
