Hace dos años OnePlus saltó a la palestra presentando un móvil que rompía los conceptos predefinidos de relación calidad-precio de la gama alta del mismo modo que un tiempo antes lo hizo el Moto G con la gama media. El OnePlus One no era perfecto pero sí marcó un hito.
Un año después la empresa lanzó su sucesor, el OnePlus 2, pero no llegó a ser tan relevante como su antecesor por aspectos como un mayor precio y los problemas con las invitaciones.
Sin embargo, por sorpresa la empresa subsidiaria de Oppo también lanzó un terminal de tamaño contenido y excelentes acabados que a todos sorprendió por esa relación calidad-precio. Fue el OnePlus X que ahora analizamos.
Vídeo análisis OnePlus X
En el vídeo, como siempre, os mostramos cual ha sido nuestra experiencia con este modelo:
Materiales, peso y dimensiones
Los acabados son probablemente lo primero que llame la atención de este modelo. Una estructura de metal que se nota en los bordes, con una textura que mejora el agarre y un tratamiento de los botones sobresaliente. El de encendido no diferencia de los de volumen en tener un acabado distinto pero sí lo hace con respecto al tercer botón físico, el del modo silencio tan característico en esta marca.
Tanto la parte trasera como delantera son de cristal y ambas están curvadas en los bordes con lo que tenemos un diseño sobresaliente y en el uso se nota el cristal 2.5 D. Esto hace que se resbale bastante.
Cuenta con botones hápticos que no están retroiluminados aunque en el modelo blanco que hemos analizado no es problema ya que la serigrafía se ve bien. Al parecer no es así en el modelo negro.
No obstante si lo preferimos podemos habilitar los botones virtuales en pantalla o cambiar la posición de los botones de volver y multitarea, algo normal en esta marca.
Cuenta con un solo altavoz que si bien tiene un volumen suficiente quizá se queda algo cojo en cuanto a calidad de sonido.
Resumen
Potencia y características
Este terminal llegaba a finales de 2015 con un procesador que hemos visto en terminales mucho más antiguos, el Snapdragon 801. La verdad es que tener un terminal de este precio con este procesador no es una mala elección y aunque obviamente se nota que no estamos ante un chip puntero sigue siendo perfectamente funcional incluso con juegos potentes aunque obviamente no rinde como otros.
La memoria RAM es de 3 GB, más que válida, sobre todo teniendo en cuanta que el sistema es muy limpio y no consume recursos extras. Los 16 GB sólo se nos han quedado cortos cuando hemos querido instalar muchos juegos muy potentes para exprimirlo.
Sin embargo sí que vemos que no estamos ante un verdadero gama alta cuando vemos que la conexión Wi-Fi no tiene banda dual con lo que sólo utilizaremos la de 2,4 GHz, que no contamos con NFC para pagos móviles o que no implementa sensor de huellas o infrarrojos.
Es cierto que todas estas prestaciones son más importantes para los más geeks que para el usuario normal que pedirá que tenga radio FM, característica con la que sí cuenta.
Pantalla del OnePlus X
Un panel de 5 pulgadas con resolución 1920×1080 píxeles en un terminal de este precio no es algo impresionante pero que use la tecnología AMOLED sí que es más raro. Esta elección permite que el uso de la pantalla ambiente cuando recibimos notificaciones o el uso del sensor de proximidad para encender la pantalla sean lógicos.
Los colores son bastante vibrantes y los negros como es lógico muy profundos lo cual justifica el cambio de tema en los ajustes a uno oscuro lo cual además nos ayudará a ahorrar batería.
Sin embargo el panel tiene un ligero viraje al azul, algo que hemos visto en otros paneles de este tipo y echamos en falta una opción en los ajustes de la pantalla para cambiar la temperatura de color.
Los ángulos de visión son bastante buenos y los reflejos no son demasiado elevados.
Cámara del OnePlus X
La interfaz de la cámara es sencilla y se inspira en la de los Nexus, no en la de Android AOSP pero echamos en falta algunas opciones y modos si bien para apuntar y disparar es correcta.
La cámara trasera tiene un sensor ISOCELL de 13 Mpx y apertura 2.2 que nos ha dado un resultado más que decente no sólo con buena luz sino también en interiores o en tomas nocturnas donde si bien en algunos momentos hemos visto ruido el resultado está por encima de los rivales en precio de este terminal. Además la velocidad de enfoque y de realización de tomas es más que rápida.
Podemos buscar algo más de rango dinámico o de contraste excesivo pero no será este un apartado decepcionante aunque en el vídeo echamos en falta el estabilizador pero no es algo a pedir en esta gama.
La cámara delantera es de 8 Mpx y un sensor Omnivision y los resultados son bastante buenos.
Autonomía
La batería de este modelo tiene un amperaje contenido, de 2550 mAh, lo que nos da una autonomía menor de la deseada.
En la primera prueba de batería hemos tenido el sensor de proximidad activo para la pantalla ambiente, hemos estado exclusivamente en interior, con Wifi y hemos visto algún vídeo, leído y navegado además de instalado algunas apps. Hemos llegado a las 4 horas de pantalla con 40 horas totales de batería.
En la segunda prueba de batería hemos hecho uso de nuevo de Wifi pero sobre todo leyendo y viendo vídeos en Facebook y en Youtube. Hemos llegado a las 4 horas y poco de pantalla con 54 horas totales de batería.
En la tercera prueba de batería hemos estado en todo momento en exteriores, usando la red 4G. Hemos navegado, usado redes sociales y también probado la cámara de fotos para la review, siempre con el brillo automático y ambient display activado. Hemos llegado a las 2 horas y media de pantalla con 12 horas totales de batería.
Benchmarks del OnePlus X
Analizar un móvil en 2016 con un procesador Snapdragon 801 es una buena oportunidad para ver cómo rinde un procesador de gama alta de hace unos años ahora.
En lo que a benchmarks se refiere hemos logrado 23530 en Quadrant, la más antigua de las apps. en Geekbench 3 llegamos a los 889 puntos con un núcleo y 2217 con cuatro. Por último en Antutu hemos llegado a los 56199.
Interfaz y aplicaciones
OnePlus usa una versión modificada de Android llamada Oxygen OS que corre sobre la versión 5.1 Lollipop. Los añadidos son curiosos como Shelf, la alternativa a Google Now que incluye accesos directos y widgets y tenemos muchas opciones que no están de forma nativa en Android pero hay contrapartidas.
El sistema no es inestable pero por ejemplo al cambiar el tema oscuro preactivado por el tema claro vemos que hay algunas zonas de los ajustes como la creación de APNs que no se ven bien porque ponen texto negro sobre fondo negro.
Por otro lado hemos tenido problemas al actualizar la OTA de hace un mes ya que tras descargarla y reiniciar el sistema nos dice que la actualización no ha sido posible.
Todo esto seguramente sea corregible mediante software pero es la cara oculta de no usar una versión más convencional de Android y, sinceramente, no compensa.
Conclusión
El OnePlus X es posiblemente el mejor exponente de 2015 de lo que la gama media puede ofrecer. Un terminal de unos 240 euros con unos acabados excelentes y un desempeño que no da problemas ni en rendimiento ni en fluidez ni en cámara ni en pantalla ni siquiera en batería donde aunque nos hubiera gustado algo más hemos de reconocer que cumple.
Destacar su tamaño contenido y sus extremas posibilidades de modificación y echarle en cara que la interfaz no esté del todo pulida y que las OTAs a veces den problema.
Los pros son mucho mayores que los inconvenientes y es esto algo que hace que recomendemos encarecidamente este terminal, sobre todo por los menos de 230 euros que cuesta.
Muy buen análisis pero no entiendo la necesidad de publicarlo a estas alturas cuando el oneplus X ya está como quien dice obsoleto (ya anunciaron que lo retiraban para vender el oneplus3).
Es cuando nos lo han cedido y nos ha gustado lo suficiente como para recomendarlo, teniendo en cuenta que cuesta casi la mitad que el OnePlus 3.