2019 es un año especial para OnePlus. Esta marca lleva mejorando sus terminales desde que empezó, hace cinco años ya, en este mercado. Pero esta es la primera vez que saca dos terminales a la vez.
En la presentación celebrada hace unos días la marca se centró en uno de ellos, el OnePlus 7 Pro, al ser el OnePlus 7 una versión pulida del último modelo del año pasado, el OnePlus 6T.
Esta es la primera vez que la firma sube radicalmente el precio de su buque insignia y, si bien el OnePlus 7 está para contentar a los que quieren un precio mas contenido, la empresa está centrando su estrategia de marketing y de imagen de marca en el hermano mayor.
OnePlus incluso busca ir más allá y empezar a comercializar sus modelos en tiendas físicas tradicionales, en distribuidores en los que se peleará directamente con Samsung, Huawei o Xiaomi, además de con las operadoras, que en países como España siguen siendo una fuente de ingresos muy relevante para los fabricantes de móviles.
Vídeo análisis OnePlus 7 Pro
Diseño y construcción: a la altura de los mejores
OnePlus lleva usando buenos materiales prácticamente desde que empezó a lanzar móviles. No siempre ha usado los mismos y en este caso tenemos un acabado trasero mate que si bien es precioso también resbala mucho. Al fin y al cabo no deja de ser cristal. Sí, hay una funda en el paquete de venta pero nos parece tan elegante y cómodo que no hemos querido usarla más de lo necesario.
Tanto la parte delantera como la trasera se curvan, algo que no gustará a los que prefieran pantallas planas. Al menos ambas piezas de cristal están protegidas con Corning Gorilla Glass 5.
El terminal tiene un degradado de color que le sienta muy bien y que se nota también en el marco de metal. En la mano es cómodo y nada cortante, pero tiene un problema bastante serio: su peso.
Los 206 gramos del terminal lo hacen muy pesado y eso se nota cuando lo tenemos mucho tiempo en la mano, ya sea en vertical o en horizontal, usando las dos para sujetarlo. Nos extraña que la marca no haya sabido contener más el peso dado que las prestaciones son muy similares a las del Samsung Galaxy S10 Plus que destacaba justo por lo contrario.
En cuanto a la disposición de botones, he de decir que es el primer móvil que no me molesta al cogerlo ni en vertical ni el horizontal dado que la posición de las teclas es alta y no interfiere con los dedos lo cojamos como lo cojamos.
Además del botón de encendido, que también puede servir para lanzar el asistente de voz, tenemos los de volumen y el deslizador que cambia entre el modo No molestar, Sonido y Vibración.
En la parte superior tenemos un micrófono de cancelación de ruido y la cámara delantera motorizada y en la zona inferior el puerto USB C, el altavoz principal y la bandeja para dual SIM (no, no tiene microSD).
¿Podría haber puesto OnePlus un jack de audio 3.5 mm? Posiblemente, Samsung lo hizo, pero no es este un fallo demasiado llamativo y creemos que actualmente el perfil de usuario que adquiera este móvil usará, bien unos auriculares inalámbricos, bien unos con puerto USB C. Y si no, siempre se puede optar por usar un adaptador.
Y ante la pregunta de si este móvil tiene o no resistencia al agua... pues la respuesta es que sí, pero no. Sí resiste al agua porque OnePlus ha sellado los orificios y ha hecho pruebas, pero no tiene la certificación porque no han pagado los test independientes. Una solución de compromiso que nos parece válida.
Resumen de características
Potencia y características: la bestia del rendimiento
OnePlus ha hecho una fuerte apuesta en este modelo en varios aspectos pero uno de los más destacables es la potencia. Como era de esperar, se ha optado por un procesador de primer nivel el Snapdragon 855. Este chip ya lo hemos analizado en móviles anteriores pero da la sensación de que aquí está a otro nivel.
Es posible que a dar esa sensación ayuden los nada menos que 12 GB de RAM. Por descontado, es el móvil con más memoria aleatoria que hemos analizado. De hecho nos hemos sorprendido cuando al jugar a Honkai Impact Third tras varias horas con el juego en segundo plano, no hemos tenido que cargar el juego de nuevo. Y hablamos de uno de los juegos más exigentes que hay en la Google Play Store.
También hay que hablar de la memoria interna, de 256 GB en el modelo que nos han cedido. Esta memoria no sólo es muy amplia en capacidad, sino que también es extremadamente rápida al usar el protocolo UFS 3.0 que hace que la velocidad de escritura sea incomparable a otros móviles. La parte negativa viene por la carencia de microSD, pero teniendo en cuenta que la cantidad mínima de memoria en este modelo es de 128 GB, no nos parece un problema.
Junto con la pantalla, estos elementos hacen que la sensación de usar el OnePlus 7 Pro sea de extrema velocidad.
En la conectividad hay que destacar el buen hacer de la red Wifi, con velocidades de subida y bajada de unos 400 Mpbs en una red de 600 Mpbs teóricos. Eso sí, por ahora nada de Wifi 6. También el posicionamiento por GPS al usar uno de doble banda, como los mejores móviles del momento. Eso si, nada de radio FM o de jack de audio como hemos dicho. Aunque sí tenemos NFC.
El sensor de huellas de este modelo es una evolución del que vimos en el OnePlus 6T. Ahora es mas rápido y es más grande, por lo que usarlo es más cómodo. Lo único que no nos gusta es que hay que despertar la pantalla para usarlo, algo que se podría solucionar por software.
Pantalla: dad la bienvenida al rey
Durante un lustro Samsung ha sido la referencia en pantallas, al menos en nitidez y vistosidad. En este 2019 OnePlus ha dado un salto adelante adoptando no sólo la resolución 2K sino también una tasa de refresco de 90 Hz.
No es el primer móvil en tenerla pero sí el primero en usarla en un panel OLED. La realidad es que al inicio estuve cambiando entre los 60 Hz y los 90 Hz y si bien notaba una ligera diferencia no me pareció demasiada pero me di cuenta de que era solo mi caso.
Personas que no son en absoluto aficionadas a la tecnología me comentaban lo mucho que le gustaba la pantalla, que parecía que todo iba mejor. No, no sabían explicar el motivo, pero lo veían. Sin duda OnePlus ha hecho que su móvil sea la referencia en este apartado.
La pantalla llama la atención incluso a los menos geeks
Eso sí, esto hace que el móvil gaste más batería por lo que si es algo que os preocupa mejor poner la resolución en FHD+ y la tasa de refresco en 60 Hz. Esperemos que OnePlus lance una actualización de software que permita que esto se adapte a nuestro uso de forma automática.
Además, las distorsiones de color cuando giramos el panel me han parecido incluso inferiores a las del Samsung Galaxy S10 Plus, que ya se portaba bien en este aspecto.
Por si fuera poco, las opciones de configuración nos permite cambiar el comportamiento de la pantalla eligiendo entre diversos modos de color, temas estéticos, tipo de fuente y muchos más aspectos. Destacar aquí la compatibilidad con DCI-P3 (que es la opción que hemos elegido) y con HDR10+ para poder ver videos en aplicaciones de streaming con la máxima calidad posible
Es posible que estemos ante el móvil con mejor pantalla del mercado, al menos por el momento.
Cámara: genial en versatilidad, imperfecta en calidad
Este 2019 podría ser el año del gran angular, el año en que hasta los móviles de gama media baja optan por poner uno de esos sensores. Como era de esperar, OnePlus también lo ha hecho pero además ha vuelto a traer el telefoto con un zoom a la altura de los mejores.
Serán tres cámaras las que tengamos en la parte trasera y ya os advierto que la versatilidad es máxima:
- Sensor principal: 48 Mpx, con apertura f/1.6, tamaño de sensor 1/2″, tamaño de píxel 0.8 µm, enfoque Laser/PDAF, y estabilización OIS.
- Sensor gran angular: 16 Mpx, con apertura f/2.2, equivalente a 13 mm.
- Sensor telefoto: 8 Mpx zoom 3x, con apertura f/2.4, equivalente a 78 mm, enfoque Laser/PDAF, y estabilización OIS.
La calidad de las mismas nos ha parecido buena sin ser espectacular y si bien es cierto que OnePlus suele lanzar actualizaciones para ello creemos que este es el punto flojo del terminal. No la cámara en conjunto, sino la calidad de las fotos en algunas situaciones.
El HDR se activa de forma automática y aunque ayuda no llega al nivel de otros fabricantes, dejando a veces algunas zonas demasiado subexpuestas y otras demasiado sobreexpuestas. También nos ha faltado en alguna ocasión algo más de detalle y de contraste, sobre todo porque las fotos parecen, a veces, demasiado planas.
Hemos hecho una rápida comparativa instalando una cámara basada en la del Pixel, con los algoritmos de Google, y los resultados son muy llamativos.
Además de los detalles, que como veis son mucho mejores con la cámara no oficial de Google, el tono de la imagen es diferente y el de la derecha se ajusta mucho más a la realidad.
Con el modo noche pasa algo similar. Las dos sacan luz de donde no la hay (la realidad es que la imagen era casi negra por completo) pero el modo del Pixel logra mantener más detalle y, de nuevo, tener una veracidad de color mayor que la de la cámara de serie.
De noche la calidad de las cámaras baja bastante y sobre todo vemos cómo se echa en falta más detalle ya que incluso antes de que la luz desaparezca del todo los bordes parecen poco definidos y si ampliamos en algunas imágenes, sobre todo en los retratos, vemos que no está a la altura de lo esperado.
En otras fotos nocturnas el detalle es mejor pero son las luces las que se comportan como en un móvil mucho mas baratos. Hemos visto terminales de menos de 300 euros aprender a controlar este tipo de cosas y OnePlus no puede permitir que su flagship sea inferior.
La grabación de vídeo en este móvil tiene aspectos positivos, como la buena estabilización de noche y de día, que no llega a la calidad del Galaxy S10 pero supera a muchos otros rivales. La parte mala es que no podemos grabar con el gran angular y que, de noche, el zoom óptico no se activa y el recorte del normal crea demasiados artefactos y ruido en la toma. Pese a eso no flaquea en este apartado.
En cuanto a la cámara delantera, antes de hablar de su calidad hemos hablar de su diseño. OnePlus ha integrado el sensor en una pieza que se mete dentro del cuerpo para que sólo la saquemos cuando la necesitemos, para un selfie o para desbloquear la pantalla con la cara si así lo configuramos.
El que sea una parte móvil siempre hace dudar pero estamos ante una construcción robusta e incluso se ha sellado esta pieza por si se nos cae al agua. Es más, si el móvil detecta que se está cayendo y la cámara esta fuera, la guardará automáticamente para protegerla del impacto.
La cuestión, entrando en la fotografía, es que las fotos que nos tomamos con este sensor son bastante mediocres, activemos o no el modo retrato. Además, el que el móvil sea tan grande hace que sea complicado usarlo a una mano, siempre tenemos la sensación de que se nos va a caer.
En cuanto al vídeo con esta cámara, curiosamente se comporta mejor, incluso de noche, logrando no trepidar las tomas en ningún momento, algo loable.
Sonido: dos altavoces muy bien aprovechados
Este es el móvil con mejor sonido que he probado en años. Los que habéis leído alguno de mis análisis sabéis que no suelo prestar una atención especial a este apartado salvo en ocasiones especiales. El motivo es que salvo rara vez, los móviles no prestan tampoco una atención especial. El OnePlus 7 Pro no es uno de esos móviles.
Dispone de un altavoz en la parte inferior, junto al cargador, y uno en la parte superior, junto al auricular. Pero lo más llamativo es que ambos son estéreo y se nota. Me di cuenta cuando jugaba a Honkai Impact Third y algo llamó la atención mientras luchaba en una partida: los sonidos de ambos altavoces no eran iguales, sino que se complementaban.
Desde luego OnePlus ha puesto el listón alto, porque además de esto tenemos un volumen muy potente, una distorsión nula y, como siempre, una tecla física que nos permite cambiar entre los modos de sonido del móvil.
Autonomía: suficiente, pero no increíble
OnePlus no se ha quedado corta esta vez con la batería de este móvil. Ha optado por una de gran amperaje, 4000 mAh, a la vez que lo ha dotado de carga rápida Warp Charge de 30W, la heredera de la Dash Charge que tango nos gustaba.
No tenemos queja de la velocidad de carga pero un móvil que supera los 700 euros debería tener de serie carga inalámbrica, aunque sea la rápida estándar de 10 W.
Hemos configurado el móvil para que en todo momento use la tasa de refresco de pantalla a 90 Hz y la reslucion al máximo, en 2K.
En la primera prueba de autonomía hemos estado en interiores, bajo cobertura Wifi y jugando mucho, además de descargando muchos datos y aplicaciones y haciendo alguna llamada breve. Hemos llegado a las 5 horas de pantalla con 24 horas de autonomía.
En la segunda prueba de autonomía hemos hecho un uso intenso de videojuegos, siempre con la pantalla con brillo automático, el modo Fnatic activado, la resolución en 2K y la tasa de refresco en 90 Hz. Hemos llegado a las 7 horas de pantalla con 15 horas de autonomía.
En la tercer prueba de autonomía hemos hecho un uso muy diferente, en exteriores, haciendo muchas fotos, escuchando música con cascos bluetooth y usando todo tipo de aplicaciones. Hemos llegado a las 6 horas de pantalla con 24 horas de autonomía.
Benchmarks
OnePlus presume de rendimiento en este móvil y aunque los benchmarks son sólo una de las formas de demostrarlo, hemos querido poner a prueba al 7 Pro.
En Antutu hemos llegado a los 342922 puntos, una de las cifras más altas que hemos visto. En Geekbench 4 llegamos a 3524/10722 y en 3D Mark, usando Slingshot, a 5441/4617.
Interfaz y apps: Oxygen puede mejorar, pero sigue siendo genial
En el mundo de los móviles Android hay dos vertientes a la hora de crear una interfaz, al menos actualmente. Marcas como Motorola o Nokia usan Android One o versiones muy limpias con algunos añadidos propios. Otras como Samsung o Xiaomi crean sus propias interfaces y modifican mucho la experiencia visual.
Y OnePlus no encaja ni en una ni en otra sección. Oxygen OS, que es como se llama su interfaz, es una reinterpretación de Android AOSP pero con muchas más opciones y con una personalización mucho más avanzada en la que destacan sus fondos de pantalla, el poder poner packs de iconos de serie, el tener modo claro, oscuro y mixto o el poder poner como color de acento (el de los botones en la interfaz) el que queramos.
En cuanto a los usos y opciones destacamos la presencia de desbloqueo facial, algo que no es obvio dado que este móvil tiene una cámara delantera retráctil. Además, es muy rápido y lo hemos usado más de una vez.
En la parte negativa, decir que no tiene opción para que al levantar el móvil encienda la pantalla, con lo que no podemos levantarlo y hacer que salte el desbloqueo facial. Si que podemos hacer esto con la pantalla ambiente pero nos obliga a poner la huella o pulsar el botón de encendido. Es un detalle tonto que nos extraña que OnePlus haya pasado por alto.
Los gestos están presentes, tanto lo de Android 9 como los de OnePlus si bien no nos gusta ninguno del todo. Por suerte cuando llegue Android 10 suponemos que sus gestos estarán operativos siendo los más convenientes (son idénticos a los usados por Xiaomi y Huawei)
Por contra, tenemos la opción de desbloquear el móvil con la huella y mantener el dedo puesto para deslizar a un lado u otro y lanzar aplicaciones de forma rápida. No es el primer móvil en el que vemos accesos directos en el sensor de huellas en pantalla, pero eso no le quita mérito.
Como hemos remarcado a lo largo de todo el análisis, el OnePlus 7 Pro es un móvil pensado para jugar y a eso ayuda el modo Fnatic, que es como se llama la configuración del terminal pensada para jugar y que se activa cuando arrancamos un juego. De esta forma no nos molestarán las llamadas o notificaciones.
Conclusión: no es perfecto, pero es una de las mejores opciones
Cuando se supo que OnePlus iba a subir bastante el precio de su terminal estrella muchos arquearon una ceja. Habría que estudiar si la marca daba más para pedir más.
La respuesta es que sí, el OnePlus 7 Pro es su mejor móvil y no sólo compite de tú a tú en aspectos como el diseño o la autonomía, sino que en algunos importantes como la pantalla o el rendimiento se coloca como el mejor. Punto.
Hay dos aspectos que podrían ser mejor, porque ningún móvil es perfecto. El que a mi me importa más es uno que ha pasado ligeramente desapercibido. Me refiero al peso. Este terminal es grande, y eso es algo que se puede perdonar, o incluso buscar dado que el aprovechamiento de la pantalla es magnífico. El problema es el peso, que es excesivo incluso para personas como yo que no valoramos especialmente los móviles pequeños y livianos.
El otro aspecto mejorable es la cámara, algo relevante para muchos, aunque no es tan grave como parece. La versatilidad de este smartphone está entre las mejores, y es la calidad la que ha de mejorar. Sin embargo, habiendo probado aplicaciones de terceros como la Gcam, puedo decir que el problema no es de la cámara y sus sensores, sino del procesado. Es decir, OnePlus tiene margen de maniobra, si quiere.
En resumen, podemos decir que el OnePlus 7 Pro es un candidato a móvil de año si tenemos todos los aspectos, incluido el precio, en consideración
¿Es para todos? No, ningún móvil lo es.
¿Es bueno? Sí, sin ninguna duda.
¿Es genial? Por supuesto.
